Comunicar Neonatología, la nueva misión de Josefina Ibarra

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Camilo estuvo internado en Neonatología por 128 días y a experiencia inspiró a Josefina, su mamá, para transmitir esta historia y visibilizar la disciplina

Josefina Ibarra es conocida por su espíritu emprendedor, gran poder de organización, ir de un lado para el otro, su energía y por formar parte de Infiltradas, el ciclo televisivo que hace siete años se emite por Canal 9 Litoral. Al ingresar a la redacción de UNO saluda con una amplia sonrisa, sus ojos brillan y contagian inmensa alegría, lo que hace difícil pensar que transitó una montaña rusa de emociones los últimos seis meses.

En noviembre del año pasado la conductora compartió al mundo que sería mamá por primera vez, pero meses después un giro inesperado cambiaría todo: en marzo de 2023 se le detectó restricción del crecimiento intrauterino (RCIU) y en cuestión de horas tuvo a Camilo por cesárea en el Instituto Rawson de la capital entrerriana.

Automáticamente el pequeño fue ingresado al área de Neonatología, pues nació con 32 semanas de gestación. A partir de allí Josefina y su pareja, Humberto Re, transitaron 128 días en el nosocomio y hace unas pocas semanas Cami -como lo llama cariñosamente su familia- conoció su hogar por primera vez. La experiencia marcó profundamente a la pareja y, por este motivo, la comunicadora decidió compartir su vivencia para concientizar, normalizar y visibilizar el área de Neonatología, una disciplina médica compleja no sólo porque se debe tratar a una persona que recién llega al mundo, sino también por el transitar emocional y psicológico que atraviesan padres, madres y familias.

“Cada momento en Neonatología es un desafío”

Al ser consultada por su embarazo Josefina recordó a UNO“Desde el comienzo presentía que esto iba a pasar… Me costó compartirlo, no podía comprar ropa y cuando la gente me preguntaba les decía que no quería o dudaba mucho”.

Cabe destacar que el RCIU, lo que provocó la decisión del nacimiento prematuro de Camilo, es una afección en la que el bebé no alcanza el peso normal durante el embarazo. “Mi médica notó que tenía una translucencia nucal intermedia -examen que mide el engrosamiento del pliegue de la nuca- y eso fue una sospecha. Se hizo un estudio genético que dio bien y el embarazo siguió adelante, pero el peso de Camilo siempre era bajo y llegamos a 32 semanas con poco peso. Ella trabaja con un médico en Santa Fe a quien le deriva las ecografías y en este consultorio se trabaja con una máquina que detecta en qué estado se encuentra la placenta y cómo está funcionando. Eso es lo que llevó a tomar la decisión de que Camilo necesitaba nacer”, detalló.

Josefina había grabado para su programa, fue a Santa Fe para este estudio y horas más tarde ya estaba internada para dar a luz. Meses después, en una entrevista con Paola Ponroy y César Abraham en Radio Plazadescribiría el final de su embarazo como abrupto y sobre esta instancia, expresó a UNO“Creo que todavía no lo proceso”, comentó y agregó “me va a llevar mucho tiempo de terapia porque es un shock muy fuerte para la mujer y la familia. No lo terminamos de procesar porque enfocamos nuestras energías en Camilo, en la Neo y conocer más sobre su funcionamiento, pero creo que recién ahora pensamos en todo lo que vivimos”.

Josefina definió su paso por esta área como “una montaña rusa de emociones”, donde destacó que los profesionales los recibieron y, desde un principio, les explicaron el paso a paso del camino que Camilo transitaría“Todos los días y cada momento en Neo es un desafío: llegás por la mañana, atravesás las puertas y necesitás ver todo: cómo satura el bebé, su frecuencia cardíaca, si tiene una vía central nueva, cómo pasó la noche. En ese momento puede estar bien, pero después te vas a almorzar, volvés y no está bien”. En este sentido, la conductora destacó que uno de los principales aprendizajes que tomó de esta experiencia fue “respetar el tiempo de cada bebé”.

La comunicadora comentó que el proceso tuvo momentos difíciles, pero también de pequeñas alegrías al ver los avances que alcanzaba Cami“Fuimos aprendiendo paso a paso y, en ese interín, fuimos conociendo a Camilo. No sé si hay un disfrute porque no estoy segura si lo hay en esa situación, pero sí hay momentos lindos y uno empieza a buscarlos, como el contacto piel con piel o tenerlo alzado el mayor tiempo posible”, comentó y remarcó que fue muy importante “ir sin esperar nada del bebé y del espacio de Neonatología es la clave”. Asimismo comentó: “Nos sirvió escribir todos los días los logros que alcanzaba Camilo: si respiró solito, si lloró por primera vez, todos estos avances nos permitieron ver con claridad todo esto”.

“Acompañado siempre es mejor”

Josefina recalcó que resultó fundamental recibir contención profesional para atravesar con mejores herramientas esta circunstancia compleja. En este sentido, Ibarra destacó el servicio de psicología al que accedió cuando su hijo estaba internado: “Te ofrecen esta alternativa cuando te ven angustiado o el bebé pasa mucho tiempo en el área. Para nosotros fue muy importante porque es una contención particular y temática sobre la Neonatología donde tratás la convivencia con el equipo médico, las demás familias y bebés, lo que le pasa a tu hijo, cómo manejar las ansiedades y tiempos del bebé. De allí surgen aprendizajes claves para sobrellevar mejor la situación”.

Por otro lado la conductora destacó lo importante que fue la contención de parte del equipo de salud que atendió a su hijo y recordó: “Una de las médicas que siguió el caso de Camilo me dijo una vez que los bebés de la Neo caminan en una cuerda floja y la comunidad de salud de esta área lo sostienen y es muy gráfico, porque te permite ver la importancia de los profesionales que te contienen a vos como padre y al bebé” y agregó: “Los cuidan con mucho amor, como si fueran sus propios hijos y buscan el confort, más allá de las cuestiones médicas. Es impresionante el amor que entregan y por eso vamos a estar eternamente agradecidos”.

Además, Josefina que para ella y Humberto fue sumamente significativo conocer y dialogar con otros padres que estaban en la misma instancia que ellos: “Te quedás mirando la incubadora con tu mente en blanco y lleno de miedos, pero cuando mirás al costado hay una mamá o un papá que pasa por lo mismo. Uno se siente reflejado y ayuda a vivir los días de una mejor manera, porque acompañado siempre es mejor”.

Para la pareja, los vínculos que formaron allí se fortalecieron con el tiempo y hoy son parte de una comunidad de padres con lazos de amistad, solidaridad y empatía“Es muy fuerte porque no te conocés de antes, pero se genera algo muy intenso, porque pasás momentos de muchísima vulnerabilidad, donde estás angustiado y encontrar el abrazo en otra familia es importante”, recalcó.

“Hay que volver hacia atrás para tomar envión hacia adelante”

Con el pasar de los días Camilo creció y comenzó a destacarse por ser un bebé con mucho ánimo, conexión y muy risueño. No obstante su sistema respiratorio era lo que evitaba una evolución mayor y, con esta preocupación, los médicos decidieron derivar a Camilo, Humberto y Josefina al Hospital Universitario Austral de Pilar (Buenos Aires), un centro de alta complejidad donde atienden especialistas en áreas como neumonología infantil e inmediatamente Cami atravesó diversos estudios.

“Tras realizar un tratamiento se diagnosticó que le hacía falta fuerza en las vías aéreas superiores y, hasta madurar eso y poder deglutir bien, necesitaba una traqueotomía”, detalló Ibarra. Este procedimiento consiste en colocar un tubo en la tráquea para asegurar una ventilación adecuada y, para la pareja, fue complejo tomar esta decisión: “Esta intervención permitió hacer este repunte que Camilo necesitaba, venir a casa y conocerla. Tuvimos que sacrificar su voz, lo que nos pesó un montón, pero lo vemos mucho mejor y hoy estamos enfocados en su avance y sus terapias”, detalló Josefina y comentó a UNO que hoy su bebé está a punto de poder sostener su propia cabeza y, junto a Humberto, celebran cada pequeño logro.

A raíz de todo lo que vivió en Neonatología, la comunicadora remarcó: “Los bebés tienen mucha fortaleza y creo que, como adulta, no sé si hubiera podido soportar todo lo que pasó él. Tenemos que aprender de ellos” y agregó “aprendimos que a veces hay que volver hacia atrás para tomar envión hacia adelante”.

Informar para visibilizar

Desde su lugar como profesional de la Comunicación, Josefina decidió compartir la historia de su familia para informar y visibilizar sobre la Neonatología, los profesionales y los bebés que viven esa situación, llamados “Superhéroes”.

“Desde el área de Neonatología se trabaja en difundir sobre la prematuridad -más que nada en la semana del prematuro- pero hasta que no lo vivís, no entendés de qué se trata”, indicó y destacó: “La información está y se lucha para que se visibilice, pero por ahí falta naturalizarlo y mostrarlo más, pero no para generar miedo sino que se sepa que es una posibilidad, pero vas a estar bien, vas a estar contenida, pero por ahí es importante que cuando te está pasando y el embarazo se complica, tener más información”.

Finalmente, Ibarra se dirigió a aquellas personas que se encuentren pasando por una situación similar, que atraviesan un embarazo o que planifican tener un hijo:“El mensaje sería conocer a tu bebé, respetar sus tiempos, aprender de ellos sin apuros, paso a paso, celebrando cada logro y vivir el día a día sin ansiedad ni miedo al futuro” y remarcó en la necesidad de seguir la intuición individual pues “todos tenemos en cada situación un olfato particular, pero a veces no confiamos en ella”.

 

Fuente:unoentrerios.com.ar

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