Pymes alertaron por un crecimiento «exponencial» de hasta un 5.000% de las importaciones en el primer semestre de 2025

Según la Asociación de Pymes Apyme de uno de los principales centros industriles del país Santa Fe, las importaciones crecieron hasta un 5.000% en el primer semestre y generan alarma en la industria local de alimentos, línea blanca y maquinaria agrícola, que advierte sobre una competencia “imposible” frente a los costos argentinos.
La Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas (Apyme) de Santa Fe advirtió sobre un crecimiento “exponencial” de las importaciones, que en algunos rubros superó el 5.000% durante el primer semestre de 2025, generando alarma en productores de alimentos, línea blanca, maquinaria agrícola y materiales de construcción.
El informe de la entidad, elaborado a partir de datos oficiales del INDEC, describe un escenario que comparó con lo ocurrido en el período 2015-2019. “Los productos del exterior avanzan con fuerza sobre el mercado interno”, señalaron desde Apyme, advirtiendo que la situación “amenaza a la industria nacional”.

El ingreso de pollo desde Brasil se disparó un 425%, tanto para venta directa en góndolas como para la industria de embutidos. Al mismo tiempo, la importación de leche en polvo creció más del 688%, con origen en Uruguay y Nueva Zelanda.
“Con el costo energético y otros factores, es muy difícil competir con el costo argentino frente a la marea de importaciones habilitadas por las desregulaciones del gobierno nacional”, afirmó Sergio Buchara, director de Relaciones Institucionales e Internacionales de Apyme.
El sector de línea blanca fue el más golpeado. Según el relevamiento, las importaciones de heladeras crecieron un 1.190% y las de lavarropas un 5.146%, principalmente provenientes de China y Brasil.
En paralelo, también se reportaron aumentos significativos en bienes vinculados a la construcción y a la maquinaria agrícola, sectores sensibles para las economías regionales.
Para Apyme, la combinación de desregulación del comercio exterior y aumento de costos internos coloca a la industria nacional en una situación de desventaja. “Ya se empieza a sentir la competencia por los precios de las importaciones respecto al costo de producir y stockearse en el país”, subrayó Buchara.