Una joven fue hallada sin vida en su cama: al lado, yacía el cuerpito de su pequeña beba de dos meses. Otro hijo de 3 años atendió el celular tras insistentes llamados de un familiar, y contó, con escasas palabras, algo de lo sucedido.
Ante insistentes llamados de un familiar de la joven, el celular fue atendido por un nene de solo 3 años (hijo de la fallecida) quien entre balbuceos contó lo sucedido. El dueño de casa, pareja de la mujer, estaba trabajando al momento del hecho.
Al lugar llegó un móvil policial y encontró la peor imagen: el cuerpo de la mujer y el de una bebé de dos meses de edad que se habría broncoaspirado aparentemente por la ingesta de leche materna.
La madre ya no presentaba signos vitales, sin embargo su beba de 2 meses fue trasladada de forma inmediata al Hospital Pediátrico Juan Pablo II, por el Grupo de Respuesta Inmediata Motorizada Nº 5.
Lamentablemente la beba arribó al nosocomio sin signos vitales y los facultativos nada pudieron hacer para salvarle la vida.
La Policía, de acuerdo a las primeras investigaciones, no halló elementos ni indicios de alguna muerte violenta.
Al lugar bajó el fiscal Gustavo Roubineau quien ordenó de inmediato la realización del hisopado respectivo a ambos cuerpos.